Pagando contribuciones weonas devuelta a casa, sacando ojos con el codo. así hasta el final de mis días dijo Hermes Abel contando una historia.
Habrá sido una ofensa el balbuceo o el encierro nos dejo weones.
No puedo evitar el asco , la ignorancia , el estrés y la busqueda por el poder. Termine llegando al hospital psiquiátrico favorito mio. Acá...
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